...hoy, he mirado más allá de la tetas de mi madre y he contemplado el mundo donde habito.
...parece que he tenido una vida anterior que no consigo recordar del todo, debe ser por mi poca edad, solo retazos de imágenes, de olores y sabores, siempre cercanos a mi madre que me observaba con cariño y con vigilancia, ya habían desaparecido algunos de sus hijos con anterioridad y nunca los había vuelto a ver, así que si notaba alguna presencia más o menos cercana, ella se ponía furiosa y era realmente un peligro para todos, menos para mi, su mirada amorosa me hacía vivir en un estado de gracia casi católico, como decía la abuela los domingos cuando volvía de la misa de 12, que digo yo que con lo grande que era la iglesia podian poner mas de un ciento, dentro, que no se cuanto es pero que es mucho.
...Empecé a inspeccionar el territorio, en uno de los vértices, estaba lo que parecía ser la mansión principal, así que di comienzo al recorrido, noté que mi madre me seguía con la máxima atención, eso si a cierta distancia.
....siempre a la izquierda y después de esa "gran aventura", llegue al punto de partida y allí estaba mi madre toda orgullosa y dispuesta a darme un aperitivo reconstituyente...me debí quedar dormido, pero aun me acuerdo del sueño, daba vueltas y vueltas a la casona y no conseguía encontrar a mi madre, sabía que estaba, la sentía, la olía, cansado me tumbé sobre la hierba del jardín, un golpes como martillazos sobre aquellas campanas odiosas que me ponen malo, me dieron tal susto que di un bote que casi pareció un vuelo.
...y allí estaba por fin mi madre, gracias al alboroto de aquellos campanazos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario